El pleno extraordinario del pasado 13 de septiembre aprobó por mayoría las modificaciones presupuestarias para llevar a efecto la revisión de los planes urbanísticos de la ciudad.
La ciudad de Medina de Pomar continúa en la actualidad funcionando con las normas urbanísticas aprobadas en 1992 y, en el caso del casco histórico, con el Plan Especial del Casco Histórico de 1998.
Hasta tres intentos sin éxito han realizado equipos de gobiernos anteriores en legislaturas pasadas para actualizar la planificación urbanística de la ciudad. Ahora el equipo de gobierno actual quiere llevar a cabo estas actualizaciones de unos planes urbanísticos “obsoletos que han permitido una expansión desordenada de la ciudad que ha crecido a golpe de demanda de vivienda sin atender a otros aspectos importantes” según explica el arquitecto y concejal de Centro Histórico y planificación urbanística, José Juan Martínez Larriba. El edil explica que con la redacción del que será el nuevo Plan General de Ordenación Urbana es “conseguir una reorganización de la ciudad teniendo en cuenta los espacios edificados, los edificables y los destinados al esparcimiento, a la vez que generar una transición más amable entre el espacio urbano y las zonas verdes que la rodean”.
El PGOU “aportará valor ambiental y paisajístico al municipio, donde el urbanismo genere una ciudad amable donde las personas se sientan cómodas”. La modificación presupuestaria mediante la que se destinará un presupuesto de 275.000 euros para licitar la redacción del PGOU se aprobó con los votos del PSOE y el grupo mixto y el voto en contra del PP.
En el caso del PECH, cuya revisión se licitará también antes de fin de año, se aprobó por mayoría la modificación presupuestaria de 140.000 euros con los votos a favor del equipo de gobierno. Entre otras cosas, Martínez Larriba apunta que “una vez esté actualizado el PECH, el Ayuntamiento podrá optar a ayudas de la administración central y regional para apoyar la rehabilitación de viviendas en el centro histórico”.