Unas doscientas personas se dieron cita en Quintana Martín Galíndez el pasado 20 de mayo para decir NO al megaproyecto de Garoña Alfacuarta que pretende instalar 151.452 placas solaces en el Valle de Tobalina. La concentración estaba convocada por los vecinos de Orbañanos, una de las localidades más afectadas por el parque solar.
En el manifiesto leído en la plaza expresaron como La instalación de este megaparque solar provocaría un destrozo medioambiental y paisajístico para una zona que está intentando darse a conocer como destino turístico con iniciativas como el embarcadero y el turismo rural, sería devastador para el valle. La desvalorización de los pueblos, de las casas y del terreno agrícola impactará negativamente en el futuro y vida de está España vaciada.
Se colorarán alrededor de 38 Kilómetros de vallas de 2 metros de altura que rodearán las 151.452 placas fotovoltaicas impidiendo el paso de animales, afectando a la fauna silvestre y a los cotos de caza mayor y menor. Además, va a generar apenas empleo que únicamente se creará durante la instalación de las placas, una vez terminado solo se necesitan algunas personas para el mantenimiento.
Por otro lado, el gasto anual de agua necesario para la limpieza de los paneles solares es de 250.000 m3 de agua al año aproximadamente y por si fuera poco la zona donde se quieren instalar las placas, está justo entre el parque y Red Natura 2000 de los Montes Obarenes-San Zadornil y el embalse de Sobrón, zona IBA protegida para las aves.
Además, si un parque fotovoltaico no es suficiente para el Valle, la misma empresa quiere construir otros dos megaproyectos más de placas fotovoltaicas en el valle, con 104.000 y 115.000 paneles respectivamente. En el comunicado se planteó como alternativa colocar los parques eólicos en entornos ya degradados de la misma forma que se ha hecho en otras provincias.