El Consejo de Gobierno aprobó el pasado 31 de agosto un gasto de 448.201 euros destinado a diferentes actuaciones encaminadas a la restauración ambiental de la antigua base militar “Picón Blanco”, ubicada sobre un paraje de elevado interés ecológico, en Espinosa de los Monteros. Se trata de una actuación financiada por la Unión Europea a través del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, Next Generation-EU.

La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio contratará por valor de 448.201 euros, con cargo a los fondos Next Generation-EU, las obras relativas a la restauración de hábitats higroturbosos -ambientes con abundancia de agua en donde se acumula turba- en los terrenos de la antigua base militar de ‘Picón Blanco’ en Espinosa de los Monteros, Burgos.

Se prevé la realización de diversas actuaciones encaminadas a la restauración ambiental de los terrenos ocupados por la antigua base militar ubicada sobre un paraje de elevado interés ecológico, en Espinosa de los Monteros, cuyas instalaciones fueron abandonadas en los años 90. En concreto se llevarán a cabo las siguientes acciones:

Demolición de la base militar de Picón Blanco, edificios, cerramiento, zapatas y carretera de acceso. Se eliminarán todos los elementos constructivos y de aquellas cimentaciones necesarias para restablecer una topografía naturalizada con el entorno, utilizándose parte de los residuos demolidos no peligrosos para esta restauración topográfica, junto con el aporte de tierra vegetal y siembra de pratenses. También se eliminarán los restos y basuras originados por el deterioro de la base militar, dispersos por las laderas aledañas.

Se llevará a cabo la restauración ambiental del espacio mediante la creación de dos vasos lagunares y su habilitación como zona húmeda, potenciando la introducción de flora y fauna autóctona y de elevada singularidad.

Por otro lado, el material pétreo proveniente de la demolición se utilizará para en la adecuación de caminos en mal estado de los montes de utilidad pública cercanos, mejorando los accesos para la gestión de los mismos. Para ello, se seleccionarán, clasificarán y triturarán los restos procedentes de la demolición, para su uso como material para el refino y repaso de caminos. Y paralelamente se clasificará, seleccionarán y almacenarán los residuos peligrosos y se transportarán a una planta gestora autorizada. Con ello se quiere fomentar la economía circular en las actuaciones propuestas, mejorando las condiciones ecológicas y paisajísticas y minimizando la generación de residuos, aprovechándolos en la mejora del entorno próximo.