Por parte del Gobierno, solo ha habido una alegación del Ministerio de la Presidencia que únicamente pide aclarar la titularidad del monumento y explicar el uso que se le va a dar antes de protegerlo.

El Ministerio de la Presidencia no pone objeción a la declaración como BIC (Bien de Interés Cultural) de la Pirámide de los Italianos siempre que la Junta de Castilla y León aclare su titularidad y defina su uso posterior, además deberá incluir una mención de reinterpretación que se ajuste a la Ley de Memoria Democrática.

Así lo explicó el pasado mes de agosto el consejero de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de castilla y León, Gonzalo Santonja, que también explicó que una vez finalizado el plazo de alegaciones, el expediente para la declaración de BIC ha recibido cinco alegaciones, y solo una de ellas es contraria a la decisión de la Junta.

El consejero explicó que “no hay oposición ” del Gobierno central al expediente de protección, pues el escrito recibido del área de Memoria Democrática indica que, “aclarada” la cuestión de la titularidad “no tiene objeción a que se declare el estatuto de protección que pudiera corresponder al inmueble”.

Además de la alegación del Ministerio, hay uno de un particular contrario a la declaración de BIC, y otros tres favorables, una de un senador del partido Hermanos de Italia, compartido con la Asociación Reivindicativa de la Memoria Histórica Raíces. Y otro informe “muy interesante” de un particular, y el informe de un  grupo de Ciudadanos del Valle de Valdebezana, que está “muy bien articulado”.