Se ha simulado un terremoto de nivel superior al terremoto base de operación de la instalación que ha causado la pérdida total de alimentación eléctrica. Este simulacro se celebra de forma anual y es requerido en el Plan de Emergencia Interior de la central nuclear.

La central nuclear Santa María de Garoña realizó el pasado 20 de abril el preceptivo simulacro anual con la participación de la Organización de Respuesta ante Emergencias del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y de la Subdelegación del Gobierno en Burgos.

Durante el ejercicio, el CSN ha realizado el seguimiento del estado de la planta y de las actuaciones del titular para recuperar las condiciones de seguridad. Asimismo, se ha mantenido en contacto con la Subdelegación del Gobierno en Burgos y con la Dirección General de Protección Civil y Emergencias para recomendar las medidas de protección radiológica que hubiesen sido necesarias en caso de haberse producido tal situación.

El ejercicio se inició a las 9:10 horas con la declaración de prealerta de emergencia del PEI debido a un terremoto de nivel superior al seísmo base de operación de la instalación que causó la pérdida total de alimentación eléctrica exterior. Posteriormente, se simuló un incendio fuera del vallado de la central que habría afectado al tanque de almacenamiento de condensado (CST). Ante la ausencia de alimentación eléctrica exterior e interior, dado que los generadores diésel se encontraban en mantenimiento, el titular declaró la alerta de emergencia al estar inoperables los sistemas de refrigeración de la piscina de combustible gastado.

Por su parte, el Centro de Coordinación Operativa (CECOP) de la Subdelegación del Gobierno, habría establecido los controles de accesos establecidos en el Plan de emergencia nuclear de Burgos (PENBU).

Finalmente, la instalación ha conseguido recuperar uno de los equipos necesarios para garantizar la refrigeración de la piscina de almacenamiento de combustible gastado.

El titular de la central ha llegado a simular la declaración de alerta de emergencia (categoría II) de su Plan de Emergencia Interior (PEI). Por su parte, el CSN ha activado su Organización de respuesta ante emergencias (ORE), llegando hasta el modo 2, que implica la activación de los grupos operativos de su Sala de emergencias (Salem). Un suceso de esta naturaleza habría sido clasificado como nivel 2 en la Escala internacional de sucesos nucleares y radiológicos (INES).