Asier Gallo es un maestro de primaria villarcayés especializado en educación especial, siempre le han gustado los animales y en especial los perros, por eso se interesó en la Educación Asistida con Animales. Hace unos meses realizó un curso para titularse como técnico en Intervención Asistida con Animales y ahora, ayudado por sus dos perritas, “Jaia” y “Uría”, realiza intervenciones con niños y niñas en distintos colegios y asociaciones de Las Merindades y la provincia de Burgos.

La razón de elegir a los perros en este tipo de intervenciones es porque son una potente fuente de estímulos, nos quieren sin conocernos y no nos juzgan, pero sobre todo porque son un elemento novedoso, divertido y dinamizador para los alumnos, que tienden a implicarse más en las actividades en las que participa un animal, y las realizan con agrado, pues desean interactuar con el perro. Por eso estas actividades están demandadas por centros educativos, asociaciones, academias o centros cívicos. Asier, junto a “Jaia” y “Uría”, sus dos perras pastoras vascas, ya han trabajado con varios colegios, como la Salle de Burgos, el colegio San Pablo de Burgos, IES Merindades de Castilla de Villarcayo, IES Castella Vetula de Medina de Pomar, CEAS de Villarcayo o Voluntared, aunque los primeros pasos los dio con los chicos y chicas de la asociación de Medina de Pomar, “Creciendo Merindades”, y cuyo apoyo ha sido muy importante para empezar a desarrollar esta actividad.
Asier primero empezó con Jaia, que tiene un carácter noble, es cariñosa, atenta y muy paciente con los niños. Un tiempo después decidió comenzar con el adiestramiento de Uría, una cachorra que desde pequeña ha convivido con niños y jóvenes, por lo que ha adquirido también un carácter muy cariñoso, los tres forman el equipo perfecto que contribuye a la mejora educativa, social y emocional de sus alumnos.
Las clases o talleres que imparte Asier junto a Jaia y Uría abarcan distintos contenidos pero al utilizar los perros como elemento motivador, son muy amenas, atractivas e interesantes para sus alumnos, que durante la clase se divierten pidiéndolas hacer trucos, como darle la pata, sentarse, devolverle la pelota, pedirlas un beso o incluso enviar y recibir mensajes.
Los beneficios que el uso de los perros en la intervención para niños y jóvenes son muchos, aumentan la autoestima, el sentido de la responsabilidad, los niveles de atención y concentración. Por otro lado, reducen la ansiedad, el sentido de soledad y alivian el estrés. También aportan beneficios físicos y aumentan el deseo y disposición para involucrarse en actividades en grupo y de trabajo en equipo.
Las Intervenciones Asistidas con Animales se utilizan en estudiantes de primaria y de secundaria, pero también pueden utilizarse con personas o colectivos que presenten necesidades diversas, como riesgo de exclusión social, trastornos de salud mental o diversidad funcional, entre otros.
Para más información, Asier está disponible en el correo electrónico:
asiergallo75@gmail.com