Esta rehabilitación era de suma importancia para la historia de la villa que este mismo año ha sido declarada como Bien de Interés Cultural en la categoría de Conjunto Histórico.

La casa fuelle, que su propietario pretendió demoler en 2018 con el pretexto de su estado de ruina, propósito al que se opuso firmemente el gobierno municipal, ha sido por fin rehabilitada. A finales del pasado mes de agosto los vecinos de Villasana veían como, por fin, se retiraban las vallas y andamios que han ocupado parte de la calzada de la calle del Medio y protegido el inmueble durante varios años.
Han pasado más de cinco años desde que en 2016 el Ayuntamiento requirió al propietario de este inmueble la colocación de un vallado de protección de este singular edificio hasta el centro de la calle del Medio para que protegiera la fachada principal con una red de andamios suficientemente potente y seguro y bien anclada a las fachadas laterales.
El permiso de derribo solicitado no fue concedido, al contrario, el ayuntamiento acordó requerir al propietario para que con urgencia presentara un proyecto técnico para la ejecución de unas obras mínimas que garantizaran la conservación y el mantenimiento del edificio, planteando su rehabilitación según su grado de protección ambiental, y que mantuviera las fachadas y la formación de cubierta en cumplimiento de lo establecido en la normativa urbanística del Valle de Mena. Todo ello sin perjuicio de las modificaciones que fueran precisas en su interior para garantizar la habitabilidad, adaptando el acceso desde la calle al inmueble y recuperando así su valor patrimonial. En caso de incumplir el requerimiento, el Ayuntamiento lanzó la advertencia de que actuaría subsidiariamente, y a cargo del propietario, ejecutando las obras mínimas necesaria para garantizar la consolidación y conservación de un edificio de indudable interés arquitectónico.
Finalmente, atendiendo al requerimiento municipal, el propietario de la casa fuelle presentó el proyecto para la reforma de la vivienda y el Ayuntamiento le concedió la licencia de obras correspondiente el 14 de diciembre de 2018. El objetivo del proyecto presentado era restaurar todo el inmueble como vivienda unifamiliar.
La casa Fuelle, una de las más características de Villasana, no es la más antigua frente a la creencia bastante extendida de que si lo es. Se trata de una construcción del siglo XIV o XV que se localiza en la esquina de la calle del Medio con la plaza de San Antonio. Es característico su entramado de madera en voladizo sobre su planta primera para aligerar la carga del muro. La casa remata en su parte trasera con un horno semicircular.