El subdelegado del Gobierno en Burgos elogia el trabajo de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado durante 2020 donde han combatido en primera línea la crisis sanitaria provocada por la COVID19.
Pedro de la Fuente resalta el grado de eficacia en el esclarecimiento de los delitos en la provincia y alerta del auge de la ciberdelincuencia.
La tasa de criminalidad en la provincia experimentó en 2020 una importante bajada al situarse en 28,8 infracciones penales por cada 1.000 habitantes, reduciéndose en 5,8 puntos respecto a 2019 donde se fijó en 34,6. Estos datos corresponden al Balance de Criminalidad correspondiente al cuarto trimestre de este ejercicio del Ministerio del Interior que hoy ha sido publicado.
El subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, ha señalado que “esta cifra es la más baja desde 2009 cuando alcanzó 38,7 puntos y está íntimamente correlacionado con las circunstancias derivadas de la crisis sanitaria de la COVID-19”.
En este sentido, De la Fuente ha elogiado de nuevo la labor de Guardia Civil y Policía Nacional, en coordinación con las policías locales, en primera línea en la lucha contra la pandemia. “Los agentes han hecho un esfuerzo extraordinario durante este último año, cuando además se ha visto incrementada su carga de trabajo con el control de la normativa dictada para prevenir y controlar los contagios”, ha señalado.
El subdelegado ha destacado que “Castilla y León y la provincia de Burgos siguen siendo lugares seguros, con tasas de criminalidad por debajo de la media nacional que es de 37,4 puntos”. Así, la tasa en la provincia es 8,6 puntos más baja que la media nacional. El descenso es común a todas las provincias de la Comunidad situándose como la quinta más segura de España con 27,3 puntos.
La provincia de Burgos es la segunda de Castilla y León que más reduce sus indicadores de delincuencia respecto a 2019. En lo que se refiere a las principales ciudades la tasa de criminalidad se sitúa en 27,6 puntos en Burgos capital, 29 en Miranda de Ebro y 38,9 en Aranda de Duero.
10.316 infracciones penales en 2020
En todo el territorio provincial, en el último año los cuerpos policiales registraron 10.316 infracciones penales, lo que supone un descenso de 16,47% con respecto al mismo periodo del año 2019, cuya cifra se situó en 12.351.
La bajada se ha producido en la gran mayoría de los tipos penales, como los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria (-21,1%); el conjunto de los delitos contra la libertad e indemnidad sexual (-7%); los robos con violencia e intimidación (-27,4%); los robos con fuerza en domicilios (-24,4%); los hurtos (-37,6%) y las sustracciones de vehículos (-42,6%). También es destacable la caída de los delitos contra la seguridad vial (-23,7%), directamente achacable a la menor movilidad en el último año.
Como excepciones destacan un incremento de los delitos conocidos de tráfico de drogas (6,8%), principalmente debido a la presión policial en el Campo de Gibraltar y a los cierres perimetrales que han tenido como consecuencia un aumento de las plantaciones de marihuana para autoconsumo y menudeo. También han aumentado las estafas (9,2%), lo cual estaría relacionado directamente con el auge de la ciberdelincuencia y se constata un importante aumento de las infracciones penales relacionadas con cuestiones de orden público (28,4%).
El porcentaje de estas infracciones esclarecido por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad se sitúa en el 40,7% en 2020 y la tasa de detenidos e investigados por cada 1.000 infracciones penales se fija en 241, el más alto de los últimos cinco años. El número de detenidos total fue de 2.485 (1.942 españoles y 543 extranjeros) frente a los 2.721 correspondientes a 2019. El subdelegado ha hecho hincapié en la eficacia de la actuación de los agentes de Policía Nacional y Guardia Civil con un alto grado de esclarecimiento de delitos. Además, ha alertado especialmente sobre el auge de la ciberdelincuencia y recomienda a la ciudadanía de que se proteja de estafas telemáticas asociadas al incremento del comercio digital.