Tres jóvenes músicos en Villarcayo, las mellizas Paola y Gabriela Troitiño y su primo Héctor Barreda y en Medina de Pomar el cantante de ópera Armando del Hoyo, amenizan las tardes de sus vecinos desde los balcones de sus casas.

El Cantante Lírico de Medina de Pomar, Armando del Hoyo se encuentra en su ciudad por casualidad, vive a caballo entre Madrid y Medina y en una de sus visitas le sorprendió aquí el estado de alarma. En Medina permanece en casa y no sabe cuándo volverá a cantar otra vez en público ya que como sabemos todos los espectáculos se han suspendido, aunque ya está pensando en la Gala Lírica que cada año se celebra en el Monasterio de Rioseco, que en principio estaba prevista para el 8 de agosto pero no se sabe si se podrá celebrar en esas fechas.
Como aportación a que sus vecinos pasen un rato agradable en su confinamiento, de vez en cuando sale al bacón de su casa situada en la Plazuela del Corral, para compartir su arte con ellos, aunque no tiene horarios fijos para que la gente no se acerque hasta allí para escucharle.
El pasado Viernes Santo cantó una saeta, que en condiciones normales debería haber interpretado durante las suspendidas celebraciones de la Semana Santa, sin embargo esta vez aunque con poco público la cantó desde el balcón de su casa para sus vecinos.
En Villarcayo son tres jóvenes músicos los que animan con su música a los vecinos, el improvisado trio musical está compuesto por las mellizas Gabriela y Paola Bustamante y su primo Héctor Barreda.
Comenzaron a tocar cuando se decretó el estado de alarma y piensan hacerlo hasta que termine. Todos los días a las 8 de la tarde desde el céntrico balcón de su casa comienzan sus pequeños conciertos, de dos o tres canciones que Gabriela elige del repertorio de la Charanga CODA de la que es miembro y, como no puede ser de otra manera, siempre dejan para el final el éxito del confinamiento, “Resistiré”.
A pesar de su juventud son músicos con experiencia pues desde muy jóvenes comenzaron en la Banda de Música de Villarcayo donde aún continúan tocando. Pero el saxo de Paola, la trompeta de Gabriela y el trombón de varas de Héctor no suenan solos, pues hay otros vecinos desde los balcones cercanos que se unen a ellos o tocan sus propias canciones, como Mateo Basurto con su batería o Ariadna Bustamante, que a pesar de llevar unos pocos meses con su saxofón también se anima a interpretar sus canciones.